8.6.07

...

Hice una taza de té, y la cubrí con el mantel. Tal como las leyes físicas lo anticipaban, el humo salió -y sale- a través del mantel. Pero la Física no pudo predecir la fantasticidad de esa imagen, ni su fertilidad.

4 Comments:

Anónimo said...

:)
saludo.

Claroscuro said...

Que lindo.

Ahora, ves que tiene sus ventajas conocer las reglas de este mundo contingencial? Es una de las razones por las que voy a dedicarme a estudiarlas, aunque me cueste
(espero no morir en el intento
^^).

Saludos.

María (Letras) said...

Bah, si lográs morirte después de haber terminado algo -y en especial algo tan complejo como comprender las reglas del mundo- hay que hacerte un monumento.
Uno siempre muere en el intento. Sino , es que ha dejado de intentarlo. Besos, Van

... said...

Si la belleza pudiera ser calculada, comenzaría a amar otras cosas, como el sonido de mi cordura rompiéndose, o las caídas desde un décimo piso. Quizás ambas.